Balance de la primera gala del festival
Este viernes comenzó la trigésimo novena edición del Festival Nacional de Tango de La Falda, el más importante que tiene este género en el país y motor para la realización de otros grandes festivales similares en el resto de Latinoamérica. El maestro de ceremonias, como desde hace ya varios años, es el experimentado Silvio Soldán y estuvo muy bien acompañado por la periodista Agustina Vivanco.
Tras una sobria bienvenida al público asistente, abrió la nocha la nicoleña Roxana Rodríguez, ganadora del Certamen de Voces. Luego llegaría el turno de un histórico como Rodolfo Tulián, referente local y de amplia trayectoria, quien con 90 años de edad volvió a pisar el escenario en un breve pero emotivo concierto. Tulián, que participó de todas las ediciones del Festival, interpretó dos tangos y luego fue homenajeado por la Comisión a través de un video y la entrega de una placa conmemorativa regalándole así a la concurrencia uno de los momentos más emotivos del evento.
Luego fue el momento de Marisa Santos y un emotivo repertorio. El cierre, en este desfile de cantores, estuvo a cargo de Esteban Riera. El destacado cantor, de amplia trayectoria en el género, abrió con una emotiva versión del tango “Cuestión de ganas”, a modo de homenaje del recordado Rubén Juárez. En este bloque de cantores, la danza estuvo muy bien representada por el ballet José Hernández y el ballet La Juntada.

La grilla de espectáculos centrales de la primera noche de gala estuvo a cargo de Andrea Ghidone y su espectáculo de música y danza Madame Tango. La uruguaya desplegó todo su talento en un emotivo homenaje al tango y a sus autores. La bailarina que, desde hace un tiempo viene desarrollando este tipo de espectáculos dedicados al tango contó sobre la creación de Madame Tango: “quería que la Calle Corrientes tuviese un espectáculo de tango para argentinos y no for export, así nace Madame Tango. Este género me ayudó mucho a humanizarme, a ser mejor persona. No me veo haciendo otro espectáculo que no sea con el tango”

Llegó el momento de la cordobesa Silvia Lallana, quien interpretó obras de Eladia Blázquez y fue acompañada por un cuarteto de mujeres músicas que la destacaron de otras propuestas.

Llegó el momento de Amores Tangos, a quien Silvio Soldán bautizó “Los Auténticos Decadentes del Tango”. El grupo, del cual forma parte el Negro Falótico, demostraron una vez más que el tango no es solo motivo de tristeza y añoranza, sino que también de alegría. Cerraron con el candombe “Siga el baile” y luego hicieron una osada versión de la cumbia “Amores como el nuestro” de Gilda en versión milonga que hasta se animaron a bailar desde el público. Así culminó un momento bisagra de la Primera Gala.
El momento, quizás, más destacado y emotivo de la noche, fue el eepectáculo que brindó Lidia Borda, una de las máximas exponentes del tango canción. La cancionista porteña, acompañada por una excelsa selección de músicos, eligió un repertorio de clásicos no tan divulgados como “Vuelvo al sur” de Piazzolla y Pino Solanas, “Palabras sin importancia”, de Manzi y Juan Cedrón, “Tormenta” de Discépolo, “Cornetín” de Manzi y “Cristal” de Mores y José María Contursi, cerrando, a modo de bis, con la ranchera picarezca de Ada Falcón “Me enamoré una vez”, con el cual, la cantora se permitió jugar con el público en un divertido ida y vuelta. Uno de los momentos para el recuerdo fue cuando interpretó, de manera entremezclada, la guarania “Mis noches sin ti” con el tango “Esta noche de Luna”. La ovación del público fue suprema.
Luego intervino la Orquesta Escuela Municipal de Tango de La Falda y cerró de manera estelar Ariel Ardit, con la calidad que lo caracteriza, quien realizó clásicos del repertorio popular y cerro junto a Esteban Riera cantando a dúo el clásica milonga «Oro y plata», de Homero Manzi y Charlo, y decenas de parejas de pie bailando al compás de la típica de Ardit.
La convocatoria fue de alderredor de un 90 por ciento..
por Federico «Poni» Rossi
Fotos de prensa del Festival
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